"Rachel
Lynn Fleeger"
2 mayo 1980 - 17 enero 1995
"¡Rachel se ha ido!” Casi no podemos creerlo. Fue tan repentino, tan insospechado – como la muerte a menudo es. Parece tan trágico, tan sombrío. ¿Pero lo es realmente? Para aquellos de nosotros que nos permitimos pensar en momentos como este, las preguntas fluyen en nuestras mentes: ¿Por qué? ¿Cómo pudo Dios permitir esto? ¿Dónde ella se ha ido? Y si hubiera sido yo, ¿dónde estaría? ¿Hay alguna forma de saberlo?
¿Por qué?
Es interesante que esta es la primera pregunta que viene a nuestras mentes cuando oímos de algo como esto. Aún así personas que deberían saber mejor nos dicen que "¿por qué?" es una pregunta sin sentido - según ellos, no hay razón para nada. La vida es sin propósito, dicen ellos. No se puede tener un diseño sin un Diseñador. Por un lado en nuestras escuelas secundarias, les dicen a los estudiante: "Ustedes tienen un propósito y un valor, por favor no se suiciden". Pero por el otro lado del corredor, les enseñan diciendo: "Nada + nadie = todo. No hay Diseñador. Sólo somos accidentes cósmicos".
A Rachel le enseñaron esto, pero ella no lo creía. Y nuestros corazones (y mentes, si lo permitimos) nos dicen que no es verdad. Aún cuando el mundo haya sido dañado por nosotros (lo que la Biblia llama pecado), hay más que diseño dejado en el universo para convencernos que Alguien lo planeó, y nos diseñó también a nosotros.
¿Cómo pudo Dios permitir esto?
Cuando preguntamos por qué, realmente estamos preguntando: "¿Por qué Alguien permitió que esto sucediera? Podríamos pensar que Él es todopoderoso pero no amoroso, o todo amor pero impotente para ayudar. Pero, ¿hay otra alternativa? ¿Podría ser que no tenemos suficiente pruebas todavía para saber cómo la muerte de Rachel encaja en el Gran Diseño? Debemos confesar que poco entendemos del mundo en que vivimos. Y si no entendemos átomos, ¿cómo diremos que entendemos al Dios que los hizo? Sus caminos son insondables, dice la Biblia. ¿Podría ser que el Señor permitió que Rachel fuera llevada al cielo temprano para que el resto de nosotros aprendiéramos algo? Vivimos como si fuéramos a estar aquí para siempre, como si no hubiera un Dios a quién conocer, o una eternidad que enfrentar. Actuamos como si sólo estuviéramos aquí para hacer dinero y gastarlo. ¡Seguramente que debe haber algo más que eso! Si sus amigos y familiares recibieron el mensaje, quizás en el único modo que realmente oiríamos- que la vida es corta y que podría ser, como en el caso de Rachel, que la muerte viniera de repente, sin darnos tiempo entonces para prepararnos a conocer a Dios, que ahora es el tiempo de prepararnos. Entonces su muerte no sería en vano; sería el mas rico legado que ella podría dejarnos.
"Rachel" es un antiguo nombre hebreo. La primera Rachel que leemos en la Biblia, como Rachel Fleeger, era "de lindo semblante y de hermoso parecer"(Génesis 29:17). Esta Rachel se casó con Jacob, el padre de la nación de Israel. A esta nación, Dios le dio la Biblia, el más destacado libro en el mundo. A este pueblo, Dios prometió que le enviaría Su Respuesta, la solución a nuestro gran problema. Con detalle cuidadoso, sobre 1.400 años, los profetas de Dios describieron con detalle gráfico cómo sería este Mesías. Puede leerlo usted mismo. Dijeron que nacería en Belén (donde la Rachel - Raquel - de la Biblia está enterrada), sería ignorado y desconocido, y luego sería rechazado por Su propio pueblo, vendido por 30 piezas de plata, sería Su espalda azotada, Sus manos y pies serían traspasados, estaría con criminales en Su muerte pero sería enterrado con los ricos, ¡y que resucitaría otra vez!
¡En realidad, Jesucristo cumplió mas de 300 profecías durante Sus 33 años sobre la tierra! Esa debería ser una evidencia convincente para nosotros. Dios pensó que así era: "Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre" (Juan 20:31).
¿Dónde ella se ha ido?
Cuando Rachel Fleeger era sólo una niña, ella oyó la Buenas Nuevas de Dios, aunque era una pecadora y merecía estar separada de Él para siempre, Dios la amó y encontró una forma de mostrarle misericordia sin bajar Su estándar de perfección. Ella creyó ese mensaje, el evangelio. En su habitación, fue honesta con Dios acerca de su pecado y pidió al Señor Jesús que fuera su Salvador personal. El 20 de octubre de 1991, hizo una declaración pública de fe en Cristo y de su deseo de ser identificada con Él porque Él murió por ella.
Más tarde, cuando un día ella fue arrebatada a la eternidad sin una nota de aviso, la Biblia dice que ella estaba "Ausente del cuerpo; presente para el Señor". Ahora mismo es lo único que realmente importa. La clase de ropa que usaba, cuánto dinero tenía, las calificaciones que tenía en la escuela- ahora mismo todo eso parece de poco importancia, ¿verdad? Pero ¿cómo podemos saber por cierto, como Rachel, que estamos listo para el encuentro con Dios?
¿Cómo podemos estar seguros?
Es obvio que si dependiera de nuestros esfuerzos, nunca podríamos saberlo. Si Rachel hubiera tenido esperanzas de haber sido suficientemente buena, o de haber hecho suficiente cosas buenas para impresionar a Dios, no podríamos tener ninguna ahora certeza acerca de ella. Pero, la Biblia dice que la Salvación es: "no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por Su misericordia", que así Él nos salvó. Rachel no pensaba que el cielo se ganaba por obras suyas; sabía que lo que se tenía que hacer ya había sido hecho, ¡por Cristo!
"Rachel" (Raquel) es la palabra hebrea “oveja” (o “cordera”). La Biblia está siempre hablando acerca de corderos- a menudo acerca de corderos que mueren. Ustedes ven, Dios dice que el pecado es tan serio que " la paga del pecado (lo que merecemos judicialmente) es muerte" (Romanos 6:23). Pero Dios dijo que enviaría a un Substituto, alguien suficientemente grandioso para satisfacer el corazón de Dios, suficientemente santo para cumplir Sus perfectos estándares, suficientemente sabio para hacer todo lo que era necesario, y suficientemente amante como para morir por pecadores como nosotros.
Entre tanto que Jesús venía, Dios enseñaba al pueblo usar corderos en Su lugar, como substitutos que ilustraban lo que Él iba a hacer. Por supuesto, que ningún cordero podía quitar el pecado. Eso era sólo una figura hasta que el Cordero de Dios viniera a quitar el pecado del Mundo.
Hace dos mil años, el Señor Jesús gritó, "¡Consumado es!" en la cruz. Dios estaba satisfecho y lo demostró levantándole de entre los muertos. Así que, cuando usted, como Rachel, esté satisfecho también con lo que Cristo hizo, y descanse donde Dios descansa - en la obra acabada de Cristo, entonces usted también encontrará perdón de pecados y vida eterna, y tendrá gozo y paz creyendo.
Si Rachel pudiera hablarnos ahora, creo que nos diría algo como: "¡El Cielo es maravilloso! ¡Es mejor de lo que hubiera imaginado! Por favor, por favor oigan lo que Dios ha dicho. Sean honestos con El acerca de sus pecados, como yo lo hice. Reciban a Cristo como su Salvador personal. Estaré tan contenta de verlos otra vez. ¡Estoy esperándolos!".